Primer plano de Pedro Piqueras con el rostro serio

Pedro Piqueras confiesa al fin el secreto de su hijo Curro

Pedro Piqueras es muy discreto con su familia y habla muy poco sobre su hijo

ACTUALIZACIÓN: Pedro Piqueras se ha despedido hoy jueves 21 de diciembre de 2023 de Telecinco con una emotiva alocución final donde no han faltado las lágrimas y la emotividad. Hoy recuperamos esta noticia sobre su hijo Curro y el secreto que ya no lo es.

Pedro Piqueras ya ha cumplido los 65 años. El periodista albaceteño es la cara que da seriedad y rigor a Telecinco entre tanto reality, polémica y plató sobresaturado de bótox y plumas.

El hombre de los informativos de Telecinco tiene una impecable trayectoria en el mundo del periodismo y ya ha llegado a la edad de retirarse. No ha confirmado cuando tiene previsto hacerlo, pero hace algún tiempo apuntaba a que quizá esta sería su última temporada en antena.

Solvente, trabajador y muy discreto, su salida de la pantalla se producirá con la misma discreción con la que cada noche cuenta las noticias. Piqueras no tiene redes sociales, por lo que todo lo que se sabe de él es a través de los medios y con las pocas entrevistas que concede.

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Lleva 40 años en la profesión y solamente ha faltado a su cita con las noticias por causas justificadísimas. Alguna enfermedad puntual, los planes de contingencia por la pandemia, que obligaban al personal a turnarse y no coincidir en plató y poco más.

Realmente, el día en que Piqueras decida colgar las botas y despedirse de sus espectadores, la ausencia se notará mucho. En Mediaset ya están pensando en quien podría sustituirle sin que esto suponga una debacle en los datos de audiencia. Eso sí Piqueras no decide finalmente alargar un poco más su carrera profesional.

Pedro Piqueras y lo que no esperaba para su hijo

Pedro Piqueras es muy receloso con su vida privada. Nacido en Albacete, en un pequeño pueblo, era buen estudiante, pero de joven tenía que ayudar al negocio familiar, una tienda de alpargatas. 

Puede presumir que en la España de la posguerra, su casa fue la primera del pueblo que tuvo televisor. Se decantó, ya de joven, por estudiar periodismo, y lo hizo en la Universidad Complutense. Empezó su trayectoria en Radio Nacional de España, se casó y tuvo a su hijo Curro.

A pesar de que su profesión es su pasión, no quería que su hijo fuera periodista.

Lo contaba en una entrevista en El Mundo. "Yo no quería que fuera periodista. Y él menos porque veía que esta es una profesión muy esclava, de muchas horas".

Piqueras se ha pasado toda la vida en el sector, trabajando a deshoras y acabando tarde de trabajar. Curro, su hijo, se decantó finalmente por la publicidad y a sus 35 años es ya un reputado publicista que trabaja en Londres, en la multinacional McCann. 

Previamente había estado en Milán, afianzando su carrera. Pedro Piqueras no esperaba que a Curro le pasaba lo mismo que a él. "Se metió en publicidad y ahora, cuando salgo de aquí y le llamo, está trabajando todavía", confesaba entre risas.

Y es que Piqueras, que termina el informativo sobre las diez de la noche, sale bastante tarde de trabajar. 

Piqueras, enamorado y discreto

Pedro Piqueras hace años que mantiene una relación con la veterinaria Esther Barriga. Es una relación discreta y no es habitual verlos en público. A Pedro y a su mujer no les gustan los actos multitudinarios, ni los saraos.

Al contrario, llevan una vida tranquila y la popularidad termina cuando se apaga el piloto rojo de la cámara.

Vive en la sierra de Madrid en una espectacular casa que combina la sencillez con la funcionalidad. Piqueras es un apasionado de la arquitectura y su gusto por el diseño y los detalles creativos se nota.

Pedro Piqueras y su pareja, Esther Barriga, durante un espectáculo flamenco en 2012
Pedro Piqueras lleva años de discreta relación con Esther Barriga | GTRES

Pedro ha vivido durante muchos años la vorágine cultural y social madrileña. En esta etapa de su vida, a las puertas de la jubilación lo que más valora es la tranquilidad "y respirar aire puro". Los veranos suele pasarlos en Altea, Alicante, cerca del mar, otra de sus grandes pasiones.

Los periodos vacacionales en los que tienen más ganas de socializar, se escapan a Ibiza. 

Pedro Piqueras, pues, está en una etapa muy tranquila de su vida y ya no tiene nada que demostrar a nadie. Cuando se jubile, sin duda, se le echará mucho de menos.