Primer plano de Mario Vaquerizo mirando a cámara

Mario Vaquerizo desvela el nuevo despido de Telecinco y firma un contrato misterioso

Mario Vaquerizo ha cometido un error y los espectadores de 'Socialité' se han dado cuenta

Mario Vaquerizo saltó a la fama por ser la pareja sentimental de Alaska, una de las cantantes más importantes del país. Empezó siendo su representante, pero ahora se ha convertido en un rostro televisivo imprescindible para determinados espectáculos. Por ese motivo firmó un contrato para convertirse en colaborador de los debates de Secret Story, el último concurso de Telecinco.

Mario Vaquerizo gana mucho dinero en televisión y ha sabido invertir su patrimonio mejor que nadie, pues siempre ha estado bastante centrado. Es propietario de varios inmuebles y ha construido un imperio envidiado por muchos, pero todo es fruto de su esfuerzo. Ningún experto en corazón ha averiguado cuánto cobra, pero todo hace pensar que sus honorarios son envidiables.

Foto de Alaska y Mario Vaquerizo juntos

Mario llama es una persona sin filtros que ha logrado conectar con el público y ganarse un hueco en el corazón de todos. Recientemente ha protagonizado un revuelo en las redes sociales a raíz de unas imágenes que ha emitido el programa Socialité. El representante de Alaska se ha acercado a una reportera del citado espacio televisivo y le ha dicho: “Tenéis nueva presentadora”.

Mario, sin darse cuenta, ha organizado un revuelo de tamaño colosal porque el público piensa que ha destapado el nuevo despido de Telecinco. María Patiño es la cabeza visible de Socialité, a pesar de que actualmente está de vacaciones y le sustituye Nuria Marín. Hay quien piensa que Nuria se quedará con el puesto de forma permanente tras las declaraciones de Vaquerizo.

Mario Vaquerizo enmienda el error: “Un beso a María Patiño”

Mario se ha dado cuenta de que ha sido demasiado sincero con la reportera de Socialité y no ha tardado en corregir el fallo. “Un beso muy fuerte para María Patiño, que sabes que te quiero”, ha comentado mirando a cámara con una sonrisa. El de Vicálvaro ha puesto sobre la mesa un debate internaste justo cuando se ha convertido en colaborador de Telecinco.

María Patiño muy sonriente mirando fijamente a la cámara
Mario Vaquerizo ha puesto sobre la mesa el despido de María Patiño | GTRES

Vaquerizo ha firmado un contrato para ser tertuliano de Secret Story y lo cierto es que ha desempañado su función mejor que nadie. No sería de extrañar que comentara el próximo concurso de Mediaset: Supervivientes 2022, el programa más mítico del grupo. Su incorporación a la empresa de Paolo Vasile no le impide trabajar en otras cadenas, pues disfruta de unas condiciones privilegiadas.

El marido de Alaska también colabora con Antena 3 y con varios programas radiofónicos porque es un hombre inquieto plagado de talento. Él mismo reconoce que tiene cierta incontinencia verbal, de ahí que transmita información que debería estar en la sombra. Un buen ejemplo es lo que ha hecho al desvelar que Socialité tiene “nueva presentadora”.

Mario Vaquerizo se sincera: “Dar gusto a mis padres”

Mario posiblemente se haya confundido y haya mezclado los despidos de Sálvame con el programa que presenta María Patiño. En este último espacio también está habiendo cambios, pero únicamente han afectado a la dirección. Según ha salido publicado, el reportero Javier de Hoyos ha ascendido y se ha convertido en el director del formato.

Vaquerizo sabe que la clave de su éxito es la sinceridad, por ese motivo jamás ha escondido ninguno de sus problemas. Estudió periodismo y logró ser uno de los mejores de su promoción, pero él tenía claro que quería dedicarse al espectáculo.

“Yo vi la facultad como un trámite burocrático. Si sacaba sobresalientes era para dar gusto a mis padres, pero en segundo de carrera ya me buscaba la vida como freelance en revistas. Lo que soy es un tío como muy despierto y muy intuitivo”, explicó en una entrevista en El Periódico.

El representante de Alaska ha conseguido ser un profesional de primer orden, de ahí que sus contratos sean los más envidiados. Tiene la capacidad de trabajar en varios sitios a la vez y siempre recibe unos honorarios que están por encima de la media.

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