Pepe Navarro no se imaginaba hace unos meses lo que se le ha venido encima. De ser uno de los presentadores más admirados y respetados de la televisión española ha pasado al foco de la polémica; y no precisamente por su trayectoria televisiva.
A Navarro le persiguen sus líos de faldas y ahora más que nunca. Yvonne Reyes ha mantenido una implacable lucha para que Pepe reconozca que el hijo de la venezolana, Alejandro, es también hijo de Pepe. A Yvonne se le ha sumado ahora, Vanessa Martín, una mujer que acusa a Pepe de maltrato, reconocido además por una sentencia judicial.
Ambas se ha adueñado de los platós de Telecinco contando por activa y por pasiva lo que ha sido su vida al lado de Pepe. Detalles, intimidades, peleas en directo con Eva Zaldívar, otra de las exparejas del presentador, que en este caso le defiende... el show del momento, en definitiva.
Pepe es experto en los tempos televisivos y en las fórmulas para lanzar su mensaje y contrarrestar a sus exparejas. Concedió una entrevista en el Deluxe, hace unos meses con el objetivo de desmontar la teoría de Ivonne. Pepe afirmó que Alejandro Reyes no es hijo suyo, a pesar de que un juez lo haya determinado.
Parecía entonces que Telecinco estaba a favor de Pepe, dándole todos los honores y la cobertura de las grandes ocasiones. Las tornas han girado y tras la entrevista de Pepe, Ivonne ha vuelto a tener un notable cabida en la parrilla de Telecinco. A ella se ha sumado Vanessa Martín, para reforzar el mensaje de que Pepe es un personaje turbio y violento.
Lo que ha pasado en directo con una llamada de Pepe Navarro confirma que en Telecinco no se toma partido por nadie. Sí, por el espectáculo y por la propia cadena, únicamente.
La llamada en directo de Pepe Navarro, censurada
Pepe Navarro, suponemos que cansado de oír a las dos mujeres repitiendo sus argumentos en contra de él, ha decidido pasar a la acción. Ha optado por llamar telefónicamente a varios programas de Telecinco y desmentirlo todo.
En Viva la vida, Pepe dio un paso más allá y la jugada le salió mal. Visiblemente cabreado, el periodista afirmó "estar harto de las mentiras de la farsante de Ivonne Reyes y de la otra farsante que se llama Vanessa Martín".
Pepe las acusaba de "tener la cara y el morro de decir esas mentiras para cobrar en televisión" y destapaba algo más. Según Pepe, "Ivonne Reyes ha llegado a un acuerdo con Telecinco para que hable lo que le salga de las pelotas con tal de no denunciar".
Pepe hacía referencia a "todas esas personas a las que la Fábrica de la Tele ha ido investigando, que son casi 200" y entre las que se encuentra Ivonne Reyes. Se trata de la operación Deluxe, que hay abierta en los juzgados por presunta investigación ilegal contra varios famosos por parte de productora de Sálvame.
Emma García, que escuchaba atentamente a Pepe afirmaba: "No sé de qué estás hablando, Pepe, me estoy perdiendo. No se si has entrado para echar la bronca y poner en evidencia a Telecinco o para qué".
Ivonne Reyes admite que tiene miedo de Pepe Navarro y toma una drástica decisión
El director del programa, Raúl Prieto, sí sabía de lo que se estaba hablando.
Cumplió a rajatabla la orden interna que algunas fuentes aseguran que hay en la cadena: no se habla de la operación Deluxe.
Así pues, la respuesta fue tajante y los espectadores pudieron oírla claramente. "Cortad la llamada!", espetaba el director. Y tal cual, a Pepe se le dejó con la palabra en la boca y la llamada se cortó, con unos incómodos segundos de silencio hasta que Emma reaccionó.
Antes Pepe había dicho: "Me da igual Telecinco, Paolo Vasile y Manuel Villanueva (director general de Contenidos de Mediaset). Y silencio.
El 'derecho a escuchar' a Pepe Navarro y a todo el mundo
Emma, profesional como pocas, salvó la situación con una poco convincente explicación.
"Yo entiendo el rebote que puede tener Pepe Navarro con esta historia perfectamente, con Ivonne y con Vanessa, pero aquí todo el mundo tiene derecho a hablar y, sobre todo, nosotros tenemos derecho a escuchar".
A escuchar a todos, menos a los que critican a Mediaset.
Así quedó claro con la censura en toda regla a la llamada de Pepe Navarro. Aquí va la secuencia entera a la que algunos periodistas como Pedro Ruiz han calificado irónicamente de "libertad pura".