Raquel Sánchez Silva

Raquel Sánchez Silva recibe un golpe inesperado sobre la muerte de su primer marido

Sánchez Silva quiere rehacer su vida sin que el pasado le siga persiguiendo

Raquel Sánchez Silva lleva años intentando pasar página de lo que ha marcado para siempre su vida.

Corría el año 2013 cuando una noticia sacudió el mundo de la comunicación en España. Mario Biondo, entonces marido de Raquel Sánchez Silva fallecía a los 30 años. 

Los hechos rápidamente ocupaban toda la atención y más teniendo en cuenta las extrañas circunstancias en las que se encontró el cadáver del cámara televisivo. Tras menos de dos meses de investigación, el caso se cerró asegurando que "no había caracteres de infracción criminal" y concluyendo que Biondo se había suicidado.

Raquel Sánchez Silva dio por buena aquella resolución y tras meses de luto y tristeza intentaba retomar su carrera profesional y su vida. Sin embargo, la familia de Mario nunca vio claras las explicaciones que se dieron y ha luchado casi diez años para reabrir el caso. Esta guerra los ha alejado de Raquel, hasta el punto los padres de Mario reniegan con dureza de la que un día fue su nuera.

Primer plano de Raquel Sánchez Silva
Raquel Sánchez Silva, perseguida por la gran tragedia de su vida | Cedida

Sánchez Silva ha seguido adelante y rápidamente rehizo su vida con el productor argentino Matías Dumont, con quien ha tenido dos hijos mellizos en 2015. Pippo y Santina Biondo, los padres de Mario, siguen empecinados en que la muerte de su hijo fue un asesinato. De momento, ya han logrado reabrir el caso en Italia y cada vez hay más indicios que apuntan a que las causas de la muerte no están nada claras.

Ahora se ha sabido también qué ha pasado con el piso en el que vivían Raquel Sánchez Siva y Mario Biondo. Supuestamente, ella lo había vendido, pero no es así.

Raquel Sánchez Silva y las informaciones desconocidas sobre su casa

Raquel Sánchez Silva tuvo que afrontar el varapalo más grande de su vida. Meses después de la muerte de Mario, abandonó el domicilio que compartía con él, ya que no se encontraba con fuerzas para seguir viviendo allí. Aparecieron tiempo después informaciones que apuntaban a que la presentadora había vendido el piso para acabar así con su pesadilla. 

Ahora El Español confirma que no es así y que el piso sigue siendo propiedad de la presentadora, quien lo adquirió en solitario antes de conocer a Mario. Lo compró en 2010 por 360 000 € según consta en la nota simple de registro. 

Piso de Raquel Sánchez Silva
Raquel Sánchez Silva posee un piso que acoge actualmente un centro de meditación zen | Mokusan Dojo Zen

Actualmente tiene el piso alquilado a los dueños de un centro de meditación zen. Allí están desde hace un año después de trasladarse desde un local cercano y realizan su actividad profesional con grupos de personas de forma habitual. 

Los actuales arrendatarios desconocían el trágico suceso que sucedió entre las cuatro paredes que ellos ocupan. "No sabíamos nada de eso, no es algo que nadie te cuente antes de alquilar una casa", han contado al enterarse ahora de los hechos. También aseguran que "el sitio es acogedor y no hay fantasmas", por lo que inicialmente no tienen intención de abandonar el piso.

El caso del que Raquel Sánchez Silva se esfuerza por pasar página

Raquel Sánchez Silva quiere cerrar definitivamente este triste episodio de su vida, pero no lo logra. En Italia, la investigación sigue en marcha y se acaban de aportar tres informes nuevos y determinantes que contradicen los informes que sustentaron la conclusión de la investigación en su momento.

El foco está ahora puesto en un profesional que según fuentes cercanas al caso "envió un informe falso" a la justicia. Lo que busca la familia de Biondo es que se haga justicia y se conozca toda la verdad. "Por lo menos se quiere, restituir la imagen pública de Biondo", al que se acusó de consumo de sustancias, de depresión.

Según la familia del joven, "se ha demostrado que no había historial de depresión y que el consumo era absolutamente incierto".

Tampoco cuadran demasiado los movimientos que se produjeron tras la muerte de Mario. Al parecer no estaba solo cuando murió, hubo conexiones desde el wifi del piso posteriores al fallecimiento y se entró a las cuentas personales de las redes sociales de Mario.

También se usó su tarjeta cuando supuestamente ya había fallecido y durante los días posteriores, se borraron muchos datos de su ordenador personal. Raquel Sánchez Silva confirmó en su momento que ella borró información privada de ambos y entró en contradicciones, según detalla La Razón, sobre el lugar en que se encontraba cuando murió su marido.

El caso está lejos de resolverse, por lo menos en Italia. En España, nunca se ha considerado que haya indicios para reabrir la investigación, a pesar de los esfuerzos de la familia del chico para lograrlo.