Tamara Falcó, hija de Isabel Preysler y de Carlos Falcó, ha sido una estrella desde que nació. Espontánea, alegre, cercana, educada... siempre ha sido el centro de atención de todos los focos.
En los últimos años, sus apariciones en distintos programas televisivos la han dado a conocer a las nuevas generaciones.
Además, su participación en Masterchef Celebrity 4 (donde fue la ganadora de la edición) le abrió las puertas del sector gastronómico. Tamara no lo desaprovechó y publicó su propio libro de recetas.
El interés que su personaje genera es tan grande que Netflix creó un programa de televisión basado en su vida: We Love Tamara.
Este personality show lideró audiencias y consiguió que el cariño del público hacia Tamara creciera aún más.
Tamara Falcó: socialité, aristócrata, chef... y también influencer
La hija mayor de Isabel Preysler se ha convertido en todo un referente, no solo por sus declaraciones, siempre sorprendentes, sino también por sus looks.
Las noticias sobre su estilismo se multiplican en los medios. Y cada vez son más quienes buscan sus modelos y su estilo desenfadado pero elegante. Incluso sus peinados han generado ríos de tinta y entusiasmo.
Sus seguidores en Instagram crecen como la espuma. Hoy alcanza la friolera de 1,2 millones de seguidores.
En pocos años ha visto multiplicados los likes, los comentarios y las reacciones. Se ha convertido en una influencer en todos los sentidos.
Tamara es consciente de ser un referente en el mundo de la moda, y a menudo en su Instagram publica sus mejores looks. No esconde sus preferencias. En varias ocasiones ha comentado su predilección por el uniforme working girl, que lleva con más estilo que nadie: «Traje de dos piezas como uniforme de vida».
Su estilo se caracteriza por mezclar prendas básicas con otros elementos sorprendentes. Además, no solo viste con grandes firmas, sino que en sus modelos podemos ver prendas de marcas low cost.
Ana Boyer se proclama la verdadera heredera
Siempre se ha dado por hecho que Tamara encarnaba la elegancia y estilo de su madre, y que nada ni nadie podría arrebatarle el puesto. Sin embargo, su hermana Ana Boyer ha conseguido hacerle sombra.
La pequeña de las Preysler no suele dejarse ver en actos oficiales, o no tanto como su hermana.
Sin embargo, gracias a su cuenta de Instagram, hemos podido descubrir a una Ana Boyer apasionada de la moda, con un estilo propio y personal.
En su cuenta se muestra como una auténtica it girl. Ana Boyer encuentra el equilibrio perfecto entre lo clásico y lo moderno.
Sobre todo desde el confinamiento, sus publicaciones han dejado al descubierto un armario inigualable, a la par que envidiable: vestidos, plumones, sneaker, prendas deportivas... que luce en sus redes y en las galas a las que acude.
El as en la manga de Ana Boyer
Uno de los mayores referentes que tiene Ana Boyer en la moda es, como sabemos, su propia madre. De ella heredó la elegancia natural y la importancia que tiene el dress code en la sociedad. Además, siempre cuenta con su opinión a la hora de escoger definitivamente un look.
Pero su madre no es la única influencia de Ana. Cristina Reyes es su estilista personal. Le ofrece todos los consejos necesarios y es su gran apoyo en todos los aspectos relacionados con el estilo y la moda.
En una entrevista en Hola, la estilista afirma que «Le gusta llevar la tendencia justa, no es nada fashion victim. Pero sí que le gusta saber que va perfecta».
La pelea por el trono
Ana Boyer ha ido ganándole terreno a Tamara como referente estilístico, y se ha convertido en una influencer que, con cada modelo, marca tendencia.
Algunas revistas y publicaciones especializadas en moda ya sitúan a Ana como la "mejor heredera" del estilo de Isabel Preysler
Tamara está que trina con estos gestos que la destronan de relevo familiar de Isabel. Tamara lleva años trabajándoselo para que su hermana ahora capitalice toda la atención.
La batalla de envidias familiar está servida.