Patricia Pardo ha explicado en El Programa de AR que Tamara Falcó tiene nuevos problemas, así que está perdida y desesperada. El espacio ha explicado, en tono de humor, que “la boda está maldita” porque no dejan de surgir contratiempos. Primero Íñigo Onieva le fue infiel, después Tamara sufrió una caída, después se quedó sin vestido y ahora podría quedarse sin menú.
Patricia Pardo ha explicado que el cocinero que había elegido la marquesa de Grinón para su boda es “primo carnal de la diseñadora”. Se refiere la creadora de su traje de novia, la misma que ha decidido romper el vínculo laboral que les unía. El chef, según han explicado en El Programa de AR, está al borde de desaparecer y podría dejar sin comida a Tamara.
“Lo único que no va a variar es el cortador de jamón, que lo hace el Museo del Jamón y eso no cambia porque es un regalo. Lo que ha pasado con la firma del vestido está claro: Tamara no va a hacer que tengan más clientas porque tienen mucha clientela. Hay gente que no quiere saber nada del salseo y por eso incluso pueden perder clientes”, explica Paloma Barrientos.
Patricia ha explicado que la hija de Isabel Preysler tiene bastantes problemas: ahora su imagen ha quedado dañada. “Hoy nos preguntamos si la imagen de Tamara ha cambiado porque ayer tenía que grabar una campaña. Los mensajes que está recibiendo en sus redes son demoledores”, informa en un tono contundente.
Patricia Pardo da todas las claves
Patricia cuenta con unos colaboradores excelentes que han conseguido hablar con Tamara. “Yo he estado encomendándome con ella, me dice que ella en estos momentos ha dejado el tema legal en manos de sus abogados. Entiendo que van a seguir adelante, que yo sepa tiene abogados, son dos los que han firmado este requerimiento”, dice Paloma Barrientos.
Leticia Requejo ha dado la cara por la diseñadora, cree que en esta ocasión la hija de Isabel Preysler debería pedir disculpas. “La primera en hablar fue Tamara y las diseñadoras se querían quedar en silencio, pero ellas solo se han defendido”.
En El programa de AR han explicado que Tamara Falcó está muy preocupada porque todo está volviéndose en su contra. Además su imagen está quedando bastante tocada, de ahí que haya cierto miedo a la hora de ayudarla.
¿Lo último? El menú que diseñó con tanto cariño pende de un hilo y está buscando otras opciones. El chef no sabe si prestar sus servicios en la boda porque se ha posicionado al lado de la diseñadora, que es familia suya.