Mila Ximénez en 'Sálvame'

Mila Ximénez: desvelan qué profesión ejercía antes de ser rica y famosa

Mila Ximénez está más viva que nunca

Mila Ximénez falleció hace dos años, pero su recuerdo sigue muy presente y en Telecinco le han rendido un bonito homenaje. La prensa ha vuelto a investigar sobre su pasado y en Trendings sabemos que hay historias que nadie ha contado hasta la fecha. Llevamos mucho tiempo hablando de Mila, pero nadie se ha preguntado en qué trabaja antes de ser una estrella.

Mila Ximénez ha vuelto a protagonizar las páginas de una conocida revista: Pronto ha desvelado cuáles son sus grandes secretos. La escritora era auxiliar de enfermería antes de hacerse famosa y ejercía como tal en Sevilla, su ciudad natal. Trabajaba en un hospital y conoció a un médico que le robó el corazón, pero estaba casado y era mayor que ella.

Mila Ximénez con su nuevo look en 'Sálvame'
Mila Ximénez ha hecho historia en la televisión | Mediaset

Mila pertenecía a una familia acomodada, sus padres no eran ricos, pero vivían bien y tenían cierto reconocimiento en Sevillla. Cuando su novio le dijo que tenían que marcharse a Madrid no lo dudó: hizo las maletas y empezó una nueva vida. Dejó la enfermería y se dedicó en cuerpo y alma a su relación, pero las cosas no salieron como ella quería.

La colaboradora de Sálvame se desenamoró del médico y al mismo tiempo conoció a Manolo Santana, el mejor tenista de su época. Le hicieron unas fotos y les chantajearon con sacarlas a la luz, así que no tuvieron más remedio que confirmar los rumores. El médico dejó a Mila y ella le advirtió: “Tú me dejas, pero yo algún día saldré en ¡HOLA!” y así fue.

Mila Ximénez quería ser una mujer independiente

Mila dependía de su novio, dejó su puesto como auxiliar de enfermería y solo contaba con los ingresos de su médico. Después de romper con él cometió el mismo error: Manolo Santana era el epicentro de su vida económica y social. Por eso, cuando tuvo la oportunidad, empezó a construir su fortuna y se convirtió en una mujer imparable.

Ximénez se dejó aconsejar por una amiga y se compró una mansión en La Moraleja, la mejor urbanización de España. Se le acabó el dinero y tuvo que vender la casa, así empezó su ruina, una ruina que logró dejar atrás. La revista Lecturas asegura que la tertuliana dejó varios millones de euros tras su fallecimiento.