Ahora que conocemos que 'Sálvame' por fin tiene fecha de caducidad este próximo 23 de junio, todavía quedan muchas sombras que persiguen a los colaboradores.
Y una de ellas es la de la operación 'Deluxe', que les acusa por la filtración de datos de un gran número de famosos. De esa forma, durante años, en el programa han estado proporcionando exclusivas que obtenían de manera muy poco legal.
Algo que involucra incluso a altos cargos de la policía y que cobra mucha importancia, sobre todo al tratarse de denuncias que afectan a personajes célebres de la prensa del corazón.
"Si efectivamente se hubiera causado un perjuicio a terceras personas, resultaría absolutamente inexplicable, por no decir escandaloso, que se hubiera permitido", apuntan al respecto.
Sobre todo, porque implicaría que han tenido acceso a bases de datos de uso policial. Y no solo eso, sino que aún sabiendo que se estaba cometiendo un delito, han permitido que siguiese prolongándose a lo largo del tiempo.
Por su parte, la defensa de los implicados insiste en que "la finalidad de los periodistas era siempre de carácter informativo". Y, por tanto, la información que se filtraba "no habría causado perjuicio alguno a los afectados".
El caso 'Deluxe', un auténtico dolor de cabeza para los colaboradores de 'Sálvame'
Lo peor es pensar en que esta actuación "habría sido tolerada por los propios responsables de la investigación", que se habrían quedado de brazos cruzados mientras "accedía a los expedientes policiales".
Según apuntan desde 'La razón' se hizo un uso reiterado de las bases políciales, "incluyendo desde denuncias, a señalamientos y detenciones".
En concreto, llegó un punto en el que se detallaban "hasta 50 consultas de personajes públicos entre el 4 de enero de 2017 y el 20 de marzo de 2018".
Y ya no solo de personajes de la prensa del corazón, sino incluso relacionados con asuntos jurídicos o con miembros de la Casa Real.
De esa forma, ahora se enfrentan ya no solo a un delito por revelación de secretos, sino también "a un posible cohecho por el supuesto pago de recompensas económicas".
Y es que los responsables podrían haber obtenido cierto beneficio económico al destapar todos esos secretos. En total, se trataría de nada menos que de ocho afectados que siguen siendo investigados.