Kiko Rivera parece haber escarmentado de todos los excesos que ha cometido en su vida. Unos excesos que le han repercutido en padecer varias dolencias importantes como los recurrentes ataques de gota o el inesperado ictus que sufrió hace tres meses.
Lo cierto es que Kiko Rivera tuvo que estar un fin de semana ingresado en el Hospital Virgen del Rocío de Sevilla. Y lo que sufrió por aquel entonces le dejó bastante tocado. Fue consciente de que tenía que cambiar de estilo de vida o podía sufrir un susto aún más grave que el citado ictus.
El caso es que los médicos le dejaron bien claro que tenía que llevar una dieta más saludable, dejar de fumar y hacer ejercicio. Además de otra serie de normas imprescindibles para que no se repitiese el ictus que le tuvo en cama varios días.
El asunto es que Kiko Rivera ha querido demostrar, subiéndose a una báscula, que ya es otro hombre. Y que a pesar de lo que digan las imágenes en las que se le veía hace poco más de una semana comiendo una hamburguesa, ha cambiado.
Lo hacía en pleno centro de Madrid, pero aquello tan solo era una anécdota y se ha puesto las pilas para enamorar de nuevo a Irene Rosales.
Eran aquellas imágenes en las que junto a sus amigos, como Rafa Mora, vimos a Kiko fumando y comiendo una hamburguesa después de visitar La Resistencia de Broncano.
Aunque, muchas veces, pocos han creído a Kiko Rivera, lo cierto es que ha callado más bocas que nunca. Y lo ha hecho con una imagen en la que se puede comprobar que ha bajado de peso de forma considerable en los últimos tiempos.
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A través de sus stories de Instagram, Rivera ha puesto de manifiesto que la báscula no engaña a nadie. Y en la imagen que ha publicado le vemos encima de la báscula portando tan solo unos calcetines de colores.
Con todo, la citada báscula marca 89,45 gramos. Un dato que, sin duda alguna, hace estar más feliz que nunca a Kiko después de pasar lo peor.
Recordemos que hace apenas unos días también era ingresado en el hospital durante la madrugada del día en el que cumplía 39 años. Se volvía a poner malo tras sufrir un cólico nefrítico. Un revés que entristecía al Dj en el día de su aniversario, pero lo llevó con la mayor resignación posible.
Ahora, solo quiere seguir perdiendo kilos y de momento, como él mismo escribía en el citado story, ya ha perdido 10 kilos más. Así, su objetivo ahora es bajar hasta los 80.
Una cifra lejana teniendo en cuenta los kilos que ya ha bajado, pero que con la capacidad de esfuerzo que ha tenido hasta hoy, todo es posible.
A pesar de las críticas recibidas, no va a dejar de intentar llegar a esta cifra mágica de los 80 kilos para satisfacción de los suyos. Y en especial de Irene Rosales y sus hijas, que son las personas que viven día a día junto a él.
Aun así, este confesaba en La Resistencia que muy de vez en cuando se da algún que otro capricho porque no puede evitar caer en la tentación.
"He cambiado mucho, pero si hay una reunión familiar o con amigos, tampoco pasa nada por tomarse alguna copa. He sido un golfo", admitía en el programa de 'Movistar +'.