Con tan solos 16 años de edad, la princesa Leonor es la primera en la línea de sucesión al trono de España. La herencia del rey emérito sigue originando una gran controversia en el territorio español.
En primer lugar, fue Felipe VI quien, a través de un comunicado, renunciaba categóricamente a la herencia. Ahora, después de lo sucedido con padre e hijo, es el turno de la futura sucesora.
El rey emérito puso a su único hijo varón como beneficiario de sus cuentas en Suiza. Al haber sido rechazado dicha voluntad; "la fortuna de la fundación deberá ser atribuida a los herederos legales nacidos o que nacieran de una unión legal". Por lo tanto, la princesa y la infanta Sofía serían las sucesoras de la herencia de su abuelo.
Es importante destacar que el padre de las todavía menores no puede renunciar al derecho de las nietas del rey emérito. Pero lo que sí se ha dado a conocer es que Leonor y su hermana ya han tomado una drástica decisión, pero hay que remarcar que aún no es de carácter oficial.
La mayor de las dos ha sido la que ha generado la polémica que ahora tiene origen en el país. Debido a lo ocurrido, la pretensión de Leonor sería la de seguir la misma línea de su predecesor y no hacer uso del dinero del emérito. Es decir, la hija del rey Felipe VI, después de que su padre rechazara dicha herencia, dio a entender que tampoco pretende hacerse acreedora del legado de Juan Carlos I.
Teniendo en cuenta que la princesa es menor de edad, todavía queda la duda de si el veredicto final lo tomará ella. Por otro lado, podría ser que se encuentre influenciada por su padre, el actual rey, o por la reina Letizia.
Todo apunta a que la decisión de Leonor sería de carácter político, y que el propósito está en desvincular a la corona española de todos los altercados económicos que rodean en torno a la figura del rey Juan Carlos I.
La herencia del abuelo de Leonor es una debate que se mantiene actualmente activo en España.
El 2020 ha sido un año bastante agitado para la monarquía española. Era por marzo, mientras el coronavirus iba propagándose por todo el mundo, cuando se dio el que sería uno de los acontecimientos más contundentes de la temporada. Y es que el padre de Leonor rechazaba fulminantemente la herencia de su progenitor.
En aquel momento, a raíz de un comunicado oficial, dio a conocer su absoluto rechazo a la herencia de su padre Juan Carlos I. "Cualquier activo, inversión o estructura financiera cuyo origen, características o finalidad puedan no estar en consonancia con la legalidad o con los criterios de rectitud e integridad que rigen su actividad institucional y privada y que deben informar la actividad de la Corona", dictaba el rey actual.
El padre de Leonor puso el foco principal en proteger a su hija mayor a través del conocido comunicado oficial. Poniendo en valor que ni él ni su sucesora nunca tuvieron conocimiento alguno sobre la actividad que tenía su padre en las fundaciones.
Manifestando así; "no haber tenido conocimiento ni prestado consentimiento a participar, en nombre propio o en representación de terceros, en particular de su hija, en ningún activo, inversión o estructura financiera cuyo origen [...] pudiera no estar en plena y estricta consonancia con la legalidad o con los criterios de transparencia".
Con esto, Leonor se mantendría alejada de todo lo que envuelve la temida herencia del rey emérito y, así, quedaría lo más limpio posible el camino a la futura reina de España.