María Teresa Campos no gana para disgustos. Si hace unas semanas era cuestionada por su propia hija al invitar a Kiko Hernández a su casa, ahora un nuevo frente se abre camino.
La participación de Bigote Arrocet en el nuevo reality, Secret Story, ha despertado los fantasmas de su pasado. Sin todavía comprender los motivos que provocaron la ruptura con Edmundo, la veterana periodista se encuentra desconcertada.
Con el fracaso de su nuevo programa todavía resonando en su cabeza, fuentes cercanas a María Teresa aseguran que no atraviesa por su mejor momento. Tal sería su estado anímico que, acostumbrada como está a los medios, procura no salir de casa por puro temor.
María Teresa Campos está hundida
El anuncio de la reaparición de Bigote tras dos años de completo silencio, ha revolucionado a la prensa rosa. El humorista ocupó durante meses el interés mediático tras dejar, sin dar explicaciones, a una María Teresa completamente enamorada.
Le costó mucho poder superar esa ruptura incomprensible para ella. Sus hijas la vieron desolada y temen que vuelva a recaer en la tristeza que le invadió aquellos meses. Aunque la presentadora afirmó que Edmundo era historia para ella, no puede evitar revolverse ante su pronta reaparición.
Su estado anímico se ha visto perjudicado ante la noticia hasta el punto de estar "destrozada". Fuentes cercanas aseguran que no quiere salir de casa por miedo a enfrentarse a las preguntas de los reporteros sobre su expareja. "Ha desarrollado algo parecido a una fobia que le impide relacionarse con la prensa", cuentan.
Así lo ha podido confirmar el periódico ABC, que sostiene que, tanto Terelu como Carmen, se han propuesto estar muy pendiente de su madre. Se avecinan semanas muy complicadas para María Teresa y no quieren dejarla sola ante el pasado más doloroso de su vida.
"Teresa todavía no tiene superado lo que pasó", asegura su círculo más cercano. "Que le estén recordando y preguntando por todo aquello, le provoca ansiedad", confiesan.
Además, lo que más alerta despierta en sus seres queridos es en cómo puede afectarle el concurso de Bigote teniendo en cuenta su avanzada edad. "Teresa está hundida y destrozada, tiene ochenta años, que a nadie se le olvide", explican.
Secret Story amenaza la tranquilidad de María Teresa Campos
Que María Teresa Campos no está para mucha polémica es algo que sus hijas llevan repitiendo desde hace tiempo. Aunque los enfrentamientos entre los miembros del clan sigue estando de actualidad, procuran que la matriarca no salga perjudicada a nivel mediático.
Sin embargo, que Bigote Arrocet haya aceptado participar en el nuevo reality de Telecinco se les escapa de las manos. Ni Terelu ni Carmen pueden hacer nada para frenar el tsunami que se le avecina a su madre.
Lo único que planean es hacer piña y estar pendiente de ella cuando el concurso se emita. Especialmente el día de la gala, marcado en rojo en el calendario de las Campos. Será entonces cuando pongan todos los medios para evitar el sufrimiento de María Teresa.
Carmen Borrego, nueva colaboradora de Sálvame, cree que Edmundo no hablará mal de su madre. Pero lo cierto es que si le han ofrecido participar en el reality, no es precisamente por sus dotes humorísticas.
El ex de María Teresa ha callado mucho durante estos años y se espera que dé algunas claves que motivaron el fin de la relación. Ha estado durante mucho tiempo viviendo con la veterana periodista y tiene mucho que contar, tanto de ella como de la relación con sus hijas.
"La cuestión es qué va a decir Bigote sobre Teresa, si es que lo va a hacer", se preguntan algunos colaboradores. Aunque la relación se rompió hace dos años, la presentadora será, sin duda, la comidilla mientras dure Secret Story.