Últimamente, Beatriz Trapote debe lidiar con el foco mediático desde el nacimiento del tercer hijo en común de María José Campanario y Jesulín de Ubrique. La periodista, que ya estaba acostumbrada a las cámaras a raíz de su profesión, tuvo que empezar a adaptarse a las críticas de la prensa.
Si antes ya era un personaje conocido, lo cierto es que su fama creció aún más cuando empezó una relación sentimental con Víctor Janeiro. A partir de entonces, prefirió mantenerse alejada de los medios por el bien de su nueva familia.
Y no es para menos porque el clan Janeiro es el más reconocido de nuestro país. Sin duda alguna es una de las familias más perseguidas por los periodistas y siempre, por una razón o por otra, los nombres de sus miembros están en boca de todos.
Como era de esperar, tras el inesperado anuncio de María José Campanario y Jesulín de Ubrique, que revelaban que estaban esperando un nuevo bebé, el foco de atención aumentó notablemente.
No cabe duda de que todos los pasos de los familiares estaban estudiados al detalle, incluidos los de Beatriz Trapote. Ahora, nuevamente, los familiares políticos de la periodista vuelven a estar en el ojo del huracán por una acción de uno de ellos.
Hubo un tiempo en el que la familia de Beatriz Trapote se prestaba a dar declaraciones ante los medios. Sin embargo, con el paso del tiempo se volvieron más reacios a confiar en la prensa, por lo que decidieron mantener las distancias.
Evidentemente, esto se sigue cumpliendo hoy en día. De hecho, pese a que María José Campanario y Jesulín de Ubrique dieron la exclusiva a través de ¡Hola!, su revista de confianza, decidieron guardar silencio respecto al nacimiento de Hugo.
La única que dio declaraciones al respecto sobre la llegada al mundo del pequeño fue la misma Beatriz. "Todo ha ido fenomenal, yo muy emocionada de ver al primito y bien. Que se recupere pronto, que salgan ellos y que os cuenten", decía.
A partir de entonces, pequeños datos sobre el entorno familiar han salido a la luz. Sin embargo, ahora Beatriz ha visto que su cuñado, Jesulín, ha incumplido la promesa que le hizo a su mujer y ha vuelto a estar en el punto de mira.
Lo cierto es que el torero ha vuelto a los ruedos tras estar dos años sin ejercer su profesión. Todo indica que, tras el nacimiento del pequeño Hugo, el padre de Andrea Janeiro ha vuelto con las pilas bien cargadas.
Su vuelta al mundo de los toros se ha producido durante el festejo para conmemorar el centenario del coso de Maella (Zaragoza). Beatriz Trapote ha visto por las imágenes que han ido circulando sobre su familiar que Jesulín se encontraba dichoso de volver a retomar su pasión.
Incluso el hijo de este, Jesús, tampoco quiso perderse tal acontecimiento. Pero no había ni rastro de María José Campanario ni de Julia Janeiro.
Desde luego, todo el mundo se quedó en shock cuando vieron que el torero volvía a su profesión tras dos largos años. Y mucho menos se esperaban que su retorno se produjera en tan solo un mes después de que naciera el cuarto hijo del torero.
Beatriz Trapote y el resto de la familia creían que el ex de Belén Esteban iba a dedicarse al completo de su familia, pero no ha sido así. Quizás, el hecho de volver a torear le ha causado esa sensación de retomar su profesión, pese a las circunstancias familiares.
No obstante, antes de volver a los toros, Beatriz Trapote vio que su cuñado la lio parda por un polémico acto. Y es que, el pasado viernes, 8 de julio, Jesulín saltó repentinamente a la plaza de toros de Pamplona durante la corrida de ese día en San Fermín.
Asimismo lo denunció el Partido Animalista (PACMA), que ha arremetido contra el torero por comprometer la seguridad del público y de la organización. "El señor Janeiro no puede poner en peligro la seguridad del evento ni la del resto del público por creerse en una posición de privilegio frente al resto", decían tajantemente.
Sin duda alguna, una grave infracción que supondría una multa desde los 6000 hasta alcanzar la gran suma de 60 mil euros. Incluso también podría traer graves consecuencias como suspensión de realizar la actividad.
No obstante, tan solo unos días después, como todavía no ha trascendido la denuncia, Jesulín pudo disfrutar de la ceremonia de Maella sin ningún inconveniente.